No quiero
zapatos que no sean mios
ideas desconocidas
ni fragancias ajenas
en mi cama.
No quiero
saber que decir
tener todo calculado
pensar solo cuando quiero.
No deseo
ser un desesperanzado
un autómata
ni caminar
solo por caminar.
Pido una esperanza
una luz que guíe
una trayectoria intuitiva
algo, un poquito
de ayuda para no perder la fé.